¿Qué comen los pájaros bebés?

Si en nuestro entorno nos encontramos con polluelos es imprescindible que dispongamos de información sobre qué comen los pájaros bebés caídos del nido. Las aves no son mamíferos, por lo que sus crías, tan pronto abandonan el huevo, no necesitan alimentarse de leche. Pero esto no quiere decir que puedan comer solos.

Vamos a encontrarnos con pájaros que, para garantizar su supervivencia, dependen de que alguno de sus progenitores o ambos se turnen para proporcionarles alimento. Este variará en función de la especie, ya que habrá pájaros con dietas a base de insectos, de granos, de semillas, de frutos, etc.

Los padres, para alimentar a estos pequeños, tienen que introducirles la comida al fondo de la boca. En general, los polluelos pían en el nido reclamando alimento y aprenden instintivamente a reconocer a sus padres, de forma que, en cuanto estos llegan, abren por completo el pico. Así, los progenitores pueden depositar la comida casi en la garganta, lo que resulta indispensable para que sus crías puedan comer.

Por eso, ante un pajarito recién nacido, que recogeremos sin pluma, cubierto o no de plumón, lo primero es identificar a qué especie pertenece, para saber qué es lo que come ese pájaro, ya que no es lo mismo lo que comen los gorriones bebés que, por ejemplo, los mirlos. Podemos orientarnos por la forma de su pico, que suele ser fino, alargado y recto en los insectívoros y más corto y cónico en los granívoros. En cualquier caso, en tiendas especializadas podremos encontrar pasta de cría adecuada. Un ejemplo de papilla casera se hace con pienso de gato remojado en agua, huevo cocido y pan rallado, todo mezclado hasta conseguir la consistencia pastosa.

Pero no solo es importante la comida. Para criar con éxito también tenemos que conseguir que el pájaro abra la boca cuando nos vea, ya que debe reaprender que nosotros también significamos comida. Si no se cumplen estos presupuestos, el pajarito morirá.

Así, al inicio de su vida, estos pajaritos van a necesitar que los alimentemos directamente en la boca. Si tenemos alguna duda o queremos confirmar la especie podemos buscar ayuda en centros de rehabilitación de aves, biólogos, expertos en ornitología, clínicas veterinarias o establecimientos especializados. En poco tiempo, estos polluelos crecerán y podrán comer solos.

En esta nueva fase, saber qué comen los pájaros pequeños también va a depender de la especie nuevamente. En el mercado encontraremos diferentes tipos de alimentos y nosotros mismos podemos incluir en la dieta semillas, insectos migas, frutos, etc., siempre en función de la especie.

Como vemos, no siempre es sencillo sacar adelante a estos bebés. No son juguetes y, antes siquiera de recoger alguna ave de la calle, debemos esperar y observar por si los padres estuviesen cerca y volviesen a buscarlo. También es buena idea intentar localizar el nido y, si en él hay polluelos vivos, podemos devolver al que se ha caído. Por otra parte, una vez recogido, si no conseguimos que coma debemos contactar con un centro especializado para que personas con experiencia se puedan hacer cargo con éxito.

Una vez nos hemos dejado aconsejar sobre el alimento más adecuado para el pájaro que hemos encontrado, nuestro objetivo será conseguir que abra su boca. Podemos estimularlo ejerciendo una ligera presión hacia dentro en las comisuras del pico. Así se abrirá un poco, lo suficiente como para introducir la pasta de cría con unas pequeñas pinzas o una jeringa, por supuesto sin aguja. Debemos llegar lo más al fondo posible de la boca. Por supuesto, este proceso debe realizarse con muchísima delicadeza.

Poco a poco el pequeño, nada más nos vea, ya abrirá por completo la boca. Al principio debemos ofrecerle comida con mucha frecuencia pero, una vez que se acostumbre y que de satisfecho, podemos ir espaciando las tomas. El pájaro comerá durante el día, pero no por la noche. Lo que comen los pájaros bebés nos lo indicarán ellos mismos, ya que, tras unos minutos de engullir, dejarán de abrir la boca, se quedarán quietos y cerrarán los ojos. Eso significa que están llenos.

Una vez aprenden a comer por sí mismos tendremos que dejarles el alimento a libre demanda, es decir, el comedero siempre tendrá que estar lleno, ya que estarán picoteando todo el día y ellos mismos se regularán. De la misma manera, en el bebedero siempre contarán con agua fresca y limpia.

Visto qué comen los pájaros bebés, en ocasiones, no es que recojamos estas crías de la calle, sino que nos decidimos a ponerles comida a las aves que viven a nuestro alrededor porque nos gusta, pensamos que lo necesitan o, simplemente, queremos atraerlas hasta nuestro jardín, huerta o balcón. Como hemos insistido, la alimentación va a depender de la especie de ave de la que se trate.

Lo más habitual es comprar o hacer un comedero para pájaros y colgarlo en las inmediaciones del domicilio. En él suelen ponerse desde las tradicionales miguitas de pan, mejor integral y siempre remojado, hasta mezclas de semillas o premios para aves que podemos comprar en las tiendas. De forma casera, el arroz y los huevos cocidos, la fruta bien madura, las pipas o el maíz, que no las palomitas, que son demasiado saladas, son alternativas que les podemos ofrecer.

Eso sí, poner comida a los pájaros de la calle puede hacer que se acostumbren al alimento fácil y dejen de buscarlo por su cuenta. No es muy recomendable que dependan tanto de nosotros. No olvidemos que no son animales domésticos.

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