Pinzamiento en perros - Tipos, síntomas y tratamiento
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El pinzamiento, o presión de los nervios de la médula espinal, puede ser debido a varias causas y se puede localizar en las tres partes de la columna vertebral canina: cuello, dorso y zona lumbar. Suele ser más común en perros de edad avanzada, con artrosis o por el desgaste de las articulaciones intervertebrales, aunque perros que han sufrido un accidente, golpes, sobreesfuerzos o malas posturas también pueden desarrollarlo.
El diagnóstico se basa en la exploración neurológica y en pruebas de imagen y el tratamiento varía según la gravedad de la lesión. Sigue leyendo este artículo de ExpertoAnimal para conocer más sobre el pinzamiento en perros, los tipos, síntomas y tratamiento.
¿Qué es un pinzamiento en perros?
Con el término de pinzamiento nos referimos a la presión que sufre un nervio por estructuras adyacentes al mismo, como huesos, cartílagos, tendones o músculos. Esta presión causa una serie de signos clínicos molestos para nuestro perro.
La columna vertebral canina
La columna vertebral de los perros está constituida por 30 vértebras, que son los huesos que conforman la columna sin incluir la cola, que depende de la raza y del individuo. Esta columna sirve como eje del cuerpo y como inserción de músculos y huesos; y es flexible debido a que las vértebras están separadas unas de otras por unas estructuras denominadas discos intervertebrales.
La columna vertebral aloja en su interior la médula espinal, que es una parte del sistema nervioso que sirve como eje y como la conexión principal con el sistema nervioso central (encéfalo). A partir de ella surgen nervios en diferentes localizaciones para inervar a los músculos de las extremidades. Además existen dos zonas claves e importantes por la cantidad de estructuras nerviosas: el plexo braquial y el plexo lumbosacro.
Tipos de pinzamiento en perros
Cuando decimos que un perro tiene pinzamiento nos referimos a pinzamientos a nivel de la columna vertebral, pudiendo ser de tres tipos:
- Pinzamiento cervical: también se denomina radiculopatía cervical, y ocurre en la zona de las vértebras cervicales del cuello.
- Pinzamiento dorsal: ocurre en las vértebras dorsales de la espalda entre el cuello y la zona lumbar. Suele ser el menos doloroso y traumático.
- Pinzamiento lumbar: es una zona bastante común por ser un lugar de rotación y de fuerza diaria. Ocurre en las vértebras lumbares, al final de la espalda de nuestro perro.
Para comprender un poco mejor los diferentes tipos de pinzamiento en perros, te recomendamos leer este otro artículo sobre Anatomía del perro - Externa e interna.
Síntomas del pinzamiento en perros
El pinzamiento en los perros provocará signos derivados de la presión que se está ejerciendo en el nervio o los nervios en cuestión, alterando su correcta función. En general, un pinzamiento en perros puede dar lugar a los siguientes signos clínicos:
- Dolor en aumento.
- Hormigueo.
- Adormecimiento de la zona afectada.
- Debilidad en la zona.
- Entumecimiento.
- Espasmo muscular.
- Crujido articular.
Además, el pinzamiento se caracteriza por presentar dolor también en las zonas donde el nervio inerva (brazo en el caso del pinzamiento cervical o a la pierna en el pinzamiento lumbar), además que en la propia zona del daño donde se produce el dolor en la raíz del nervio (dolor radicular).
Con el paso del tiempo, el pinzamiento puede causar una hernia discal. Esto es debido a que el boqueo de la vértebra en la misma posición debida a la presión, causa daño en el disco intervertebral que presiona el nervio. Esta presión y postura estática mantenida en el tiempo provoca que el disco intervertebral vaya fracturando los anillos vertebrales, causando primero una protrusión y después una hernia. Cuando se produce un daño grave puede llegar a cortar la transmisión nerviosa y causar parálisis.
Causas de pinzamiento en perros
El origen del pinzamiento vertebral en los perros puede atenerse a las siguientes causas:
- Edad: el desgaste de las articulaciones intervertebrales en perros mayores puede hacer que estén más frágiles y predispuestas a sufrir presiones nerviosas
- Sobreesfuerzo.
- Mala postura.
- Artrosis: enfermedad degenerativa por el descaste del cartílago articular de una articulación. En el caso de artrosis vertebral, puede predisponer a pinzamientos
- Traumatismos: golpes en la columna pueden causar pinzamientos, además de otros problemas de discos intervertebrales y otros daños en tejidos blandos.
Por todo ello, recomendamos un chequeo periódico con el veterinario.
Diagnóstico del pinzamiento en perros
Para diagnosticar esta patología, lo primero es realizar un análisis neurológico del perro, a fin de determinar la localización de la lesión y sus consecuencias a nivel de los reflejos espinales, fuerza y movilidad. El diagnóstico definitivo del pinzamiento en perros se consigue con pruebas de diagnóstico por imagen, como son:
- Radiografía simple.
- Radiografía de contraste.
- Tomografía computarizada.
- Resonancia magnética.
Las dos últimas pruebas son las mejores para determinar la localización de la lesión, así como su grado de afectación y su gravedad. También son claves a la hora de planificar el tratamiento quirúrgico en los casos más complicados, como en los casos de hernia discal.
No hay que olvidar que algunas enfermedades como el hipotiroidismo y la diabetes mellitus pueden afectar a los nervios periféricos y confundir en determinados casos el diagnóstico, por lo que siempre se debe realizar una analítica sanguínea a fin de descartar estas enfermedades.
Tratamiento del pinzamiento en perros
Cuando el grado del pinzamiento es leve, el tratamiento será conservador mediante terapia médica con antiinflamatorios, reposo y calor en la zona. En cambio, cuando hay signos neurológicos pero la lesión no es muy grave, también suele responder bien con terapia antiinflamatoria, pero habrá que estar muy pendiente de la evolución y de las posibles complicaciones.
No obstante, cuando el déficit neurológico no mejora y, al contrario, va a más, se debe planificar la cirugía, sin esperar demasiado porque si se espera mucho tiempo, la lesión puede ser irreversible.
La cirugía busca liberar la médula espinal y las raíces nerviosas de la presión que está sufriendo mediante una intervención quirúrgica, llamada laminectomía, para retirar parte de la vértebra o vertebras afectadas y permitir el paso de la médula y su descompresión. Por su parte, la fisioterapia es un buen complemento para una mejor y más pronta recuperación.
Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.
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