Mi perro está decaído, ¿qué puede ser?

Como hemos dicho, un perro que está decaído puede ser por un listado interminable de causas, por lo que nos centraremos en apuntar las más comunes pero, en primer lugar, debemos saber a qué nos referimos cuando hablamos de un perro decaído.

Por decaimiento entendemos un perro que está quieto, sin interés por su entorno y sin realizar sus actividades cotidianas o llevándolas a cabo con desgana. A este cuadro pueden añadirse otros síntomas que ayudan a orientar el diagnóstico, pues el decaimiento es un signo general, común en muchas enfermedades. En un perro decaído podemos notar también:

• Quejidos intermitentes.
• Jadeos excesivos.
• Movimientos lentos.
• Vómitos y diarrea.
• Temblores.

Sigue leyendo para descubrir las causas por que mi perro está decaído.

¿Has llegado al punto que te preguntas por qué mi perro no quiere comer, está triste y delgado? La anorexia es la falta de apetito, es decir, en estos casos observaremos que el perro está decaído y no quiere comer, lo que puede ser por diferentes causas.

La primera en la que podemos pensar es en algún trastorno digestivo que le produce malestar al perro y, en consecuencia, deja de comer. Generalmente, la situación dura unas horas y no se complica con la aparición de más síntomas, pero en los casos en los que no remite debemos acudir al veterinario, ya que detrás de este decaimiento puede estar la presencia de parásitos internos, que explicaremos más adelante.

Otra de las causas por las que mi perro no quiere comer y está triste es la alimentación, pues el malestar digestivo puede deberse a alimentos inadecuados o a que el perro ha comido algo indebido. Una vez repuesto, lo habitual es que el perro vuelva a comer con normalidad. Si no es así, para animarlo al principio podemos recurrir a alimento húmedo o casero, más apetecible.

Por último, también podemos mencionar el estrés y la depresión en perros como un motivo por el que mi perro no quiere comer y está decaído. Esto se debe a que ellos también sufren los cambios ambientales y las pérdidas de personas de nuestro alrededor, por lo que si en los últimos días ha habido algún cambio en tu vida, probablemente este sea el motivo.

Mientras que en algunos casos, como hemos visto, nos podemos encontrar que mi perro no quiere comer y está decaído, además de triste, existen otras situaciones en las que aunque el perro esté decaído sigue comiendo de forma habitual.

En estos casos debemos observarlo porque podría estar en las fases iniciales de alguna enfermedad. Por ejemplo, una gastroenteritis en perros puede quitarle las ganas de jugar y moverse, mientras que, al principio de este trastorno, sigue teniendo ganas de comer. Ante cualquier mínimo cambio en su conducta debemos contactar con el veterinario.

Un perro que está decaído y vomita o tiene diarrea puede deberse a trastornos digestivos como los que hemos señalado en el apartado anterior. Una infestación de parásitos intensa puede provocar vómitos y diarrea, secreciones en las que es posible que lleguemos a ver gusanos. Cualquier alteración que afecte al tracto digestivo como una infección o un cuerpo extraño pueden provocar malestar en el perro, decaimiento y vómitos.

En las afecciones más leves el cuadro remite solo en unas horas, pero cuando esto no es así o se agravan los síntomas debemos acudir a nuestro veterinario para que inicie el tratamiento. Si el perro pierde líquidos en forma de vómitos y/o diarrea y no los repone, corre el riesgo de deshidratarse, especialmente grave en cachorros. Estos casos pueden requerir fluidoterapia.

Te contamos más sobre los Parásitos en perros: tipos, síntomas y tratamiento a continuación.

Llegados a este punto, quizá también te preguntas por qué mi perro está raro, como triste. ¿Qué tiene? En este caso, si nuestro perro está decaído y sin fuerzas puede ser porque está padeciendo alguna enfermedad que normalmente vendrá acompañada de otros síntomas, además de los mencionados.

Estos pueden ser inespecíficos, como un aumento en la ingesta de agua y en la micción, o ya indicativos de afecciones concretas, como una ictericia, que es la coloración amarillenta de las mucosas que se da en problemas hepáticos.

Pruebas como los análisis de sangre o de orina nos pueden servir para localizar el órgano afectado. Si te encuentras con que mi perro tiembla y está decaído, además de débil, puede estar manifestando alguna lesión neurológica, muscular u ósea, que le produce dolor e inestabilidad. En estos casos, es normal que notemos que el perro está decaído y llora.

Por ejemplo, en los perros de más edad puede deberse a una artrosis, pero en un cachorro podríamos estar ante un caso de moquillo, en el que observaremos otros síntomas como fiebre, tos y mocos. Hay que tener cuidado porque los temblores en perros también aparecen en casos de intoxicaciones, en los que es fácil que veamos, además, hipersalivación o descoordinación. Es una urgencia veterinaria que requiere atención inmediata.

Consulta nuestro artículo sobre Moquillo en perros: síntomas, contagio y tratamiento y revisa todos los síntomas, puesto que si tu perro está decaído y babea, es posible que se trate de esta patología.

Si un perro está decaído y duerme mucho puede ser conveniente revisarlo, controlando su temperatura, el color de sus mucosas y su respiración, para asegurarnos de que no se encuentre en un estado de shock y responde correctamente a los estímulos. Si el perro está frío, respira con dificultad o sus mucosas han perdido la coloración rosada, debemos acudir al veterinario inmediatamente.

Debemos saber que es normal que los cachorros duerman mucho, al igual que los perros de más edad, que pasan a dormir más de día y menos durante la noche. Pero si este sueño se acompaña de decaimiento siempre debemos comunicárselo a nuestro veterinario:

• En un cachorro: podría estar indicando algún problema de parásitos.
• En un animal geriátrico: es normal que observemos un descenso de la actividad pero si esta se acompaña de decaimiento o algún otro síntoma tendremos que acudir al veterinario, pues podría estar padeciendo alguna enfermedad cardíaca, renal o hepática, más habitual en los perros mayores.

También puede ser que tu perro esté decaído y duerma mucho debido a la estación del año en la que nos encontremos. Con el calor, los canes pierden gran parte de la energía, lo que limita sus movimientos. En estos casos, ten cuidado que tu perro no sufra un golpe de calor.

Ahora que ya sabes las causas por que mi perro no quiere comer y está triste, además de otras situaciones como mi perro está decaído y duerme mucho o sí come, no dudes en echarle un vistazo al siguiente artículo de ExpertoAnimal que te recomendamos para conocer algunas de las Enfermedades de perros mayores.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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