¿Los perros pueden comer nectarina?

La nectarina es una fruta perfectamente apta para los perros, es decir, los perros sí pueden comer nectarina, siempre que se la ofrezcamos con seguridad y en las cantidades apropiadas. Dicho de otra manera, los perros deben seguir una dieta básicamente carnívora. Las proteínas procedentes de tejido animal, como las que se encuentran en la carne o en el pescado, deben constituir el grueso de su alimentación.

Las nectarinas podrían formar parte de su menú, pero en pequeñas cantidades, complementando a la carne, o de manera puntual a modo de premio saludable. Si un perro se excede en el consumo de nectarinas, estará dejando de ingerir nutrientes imprescindibles para su salud y sus requerimientos nutricionales se verán afectados.

Decimos que los perros pueden comer nectarinas, pero nos referimos solo a la fruta al natural. No debemos darles nectarinas en otras preparaciones, como la mermelada o las conservas con almíbar, ya que contienen una enorme cantidad de azúcar del todo desaconsejada para los perros.

La nectarina es una fruta carnosa, dulce y sabrosa que, por ello, puede resultar interesante para los perros. La nectarina, básicamente, va a aportar agua (hasta 87 gramos de cada 100), fibra, vitaminas y minerales. Esto las convierte en un ingrediente saludable para incluir en la dieta de los perros. Nos referimos a vitaminas como la A, las del grupo B y la C y a minerales como el magnesio, el fósforo y el potasio.

Además, no contiene muchas calorías. Se le atribuyen, aproximadamente, 40 por cada 100 gramos. Esto la hace apta como premio saludable también para los perros que necesitan controlar las calorías que ingieren. No contiene más de 9 gramos de azúcar por cada 100 y posee un bajo índice glucémico (capacidad para elevar la glucemia en sangre).

El contenido en fibra y agua de esta fruta puede favorecer a los perros con estreñimiento, ayudándoles a mejorar su tránsito intestinal. Eso sí, hay que saber que esta ayuda funcionará en casos leves de estreñimiento. En los graves será insuficiente y habrá que acudir al veterinario. Aquí encontrarás más información: "Estreñimiento en perros - Causas, síntomas y tratamiento".

Como hemos comentado, la nectarina puede darse siempre que se respeten dos criterios básicos: debe ofrecerse de manera puntual y en pequeñas cantidades. Así, podemos darla de vez en cuando a modo de premio saludable, pues es una fruta jugosa que suele gustar a los perros. Otra opción es incorporarla al menú del animal si lo alimentamos con comida casera. En este caso, será el experto en nutrición canina quien nos deba indicar qué cantidades de nectarina debemos ofrecer y cada cuánto tiempo.

La única precaución que debemos tomar con la nectarina, además de lavarla, es retirarle el hueso. Este podría atragantar a algunos perros y, además, contiene trazas de cianuro, motivo por el que no es conveniente que los perros lo mordisqueen o lo traguen. Sobre la piel, podemos dejarla o retirarla. Aunque se relaciona con el melocotón, la nectarina no va a tener vello, por eso no hay problema en comerla con la piel. La carne de la fruta la cortaremos en trozos, dependiendo del tamaño de nuestro perro.

En este otro artículo hablamos de los melocotones: "¿Los perros pueden comer melocotón?".

Cantidad de nectarina para perros

La cantidad de nectarina para dar como premio no es igual para todos los perros, ya que hay que tener en cuenta su talla. Para un perro pequeño un par de trozos a la semana pueden ser suficientes. En cambio, los perros grandes o gigantes podrán comer hasta una nectarina entera, siempre que no sea muy grande.

Hemos dicho que los perros pueden comer nectarina, pero es mejor que la evitemos en las siguientes situaciones:

• Perros que ya han consumido nectarina o frutas similares y hemos constatado o sospechamos que les sientan mal o les han provocado algún tipo de reacción adversa. Para evitar problemas, si queremos dar nectarina, lo mejor es empezar por una pequeña cantidad y observar si le provoca al perro algún efecto negativo.
• Perros con el estómago delicado, pues el contenido en fibra y agua de la nectarina podría aumentar el tránsito intestinal y desencadenar problemas como la diarrea.

También hay que señalar que un consumo excesivo de nectarinas puede tener como consecuencia la aparición de trastornos digestivos, sobre todo diarrea, aunque también podría haber vómitos o molestias abdominales. Normalmente, será un malestar transitorio que remita por sí solo en cuestión de 24-48 horas.

Pero si el consumo ha sido verdaderamente grande en relación con el tamaño del perro, se trata de un perro vulnerable (cachorro, anciano, enfermo o debilitado) o el cuadro es muy intenso y no cesa, habrá que contactar con el veterinario.

En este vídeo encontrarás más frutas que puedes compartir con tu perro:

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