Fibrosarcoma en perros: síntomas y tratamiento

Si te preguntas qué es un fibrosarcoma, debes saber que es un tipo de tumor maligno que tiene su origen en los tejidos blandos, que son los tejidos conectivos. La función de estos tejidos es rodear y sostener los demás tejidos y órganos del cuerpo. Estos tumores son generalmente sólidos y pueden encontrarse en diferentes partes del cuerpo del canino, aunque los más frecuentes aparecen en la piel, en el tejido subcutáneo y en la región oral.

Este tipo de tumor puede crecer muy lentamente, pero al considerarse invasivo se puede infiltrar en los tejidos cercanos y agravar el problema. Aunque no suelen diseminarse a órganos distantes, podría suceder una metástasis después de una cirugía de extracción si no se eliminan completamente.

Puede aparecer como una masa firme e indolora en la piel o debajo de esta.

Los síntomas del fibrosarcoma en perros pueden variar dependiendo de la ubicación, el tamaño y el tiempo que lleven en el cuerpo. En general, estos son los síntomas que pueden indicarte la presencia de un fibrosarcoma:

• Bulto firme y no doloso en la piel o en la cavidad oral, el cual puede crecer lentamente.
• Salivación excesiva, mal aliento, sangrado y pérdida de piezas orales, además de dolor e hinchazón de la zona, si aparece el fibrosarcoma en la boca del perro.
• Cojera si se localiza en alguna extremidad.
• Hinchazón o cambios en la apariencia facial si está localizado en la cabeza o cuello, además de problemas al abrir la boca si el tumor invade el hueso o el tejido circundante.
• Pérdida de peso, apatía, pérdida de apetito, irritabilidad y dolor al tocar la zona donde se encuentra el tumor.
• Vómitos y/o diarrea.

No todos los bultos en perros son fibrosarcomas, por ello te recomendamos consultar este post: "Bultos en perros: tipos y tratamientos".

No existe una causa específica que explica por qué aparece el fibrosarcoma en perros, pero sí se sospecha que pueden ser tanto genéticas como ambientales, incluyendo las siguientes:

• Predisposición racial: razas como el golden retriever, el labrador y el dóberman pinscher, por ejemplo, son algunas razas que pueden tener mayor riesgo de desarrollar un fibrosarcoma.
• Mutaciones genéticas: ciertos cambios o mutaciones en los genes que controlan el crecimiento y la proliferación celular pueden predisponer también a los perros a desarrollar tumores como el fibrosarcoma. Estas mutaciones pueden ser hereditarias o adquiridas a lo largo de la vida del perro.
• Edad: aunque puede ocurrir en perros de cualquier edad, es más frecuente en perros de edad avanzada.
• Una dieta inadecuada y el estrés pueden favorecer el desarrollo de este tumor. En este artículo te hablamos sobre la alimentación correcta: "¿Qué comen los perros?".
• Alteraciones en el sistema inmune también pueden aumentar el riesgo de desarrollar tumores malignos.

El diagnóstico para detectar si efectivamente tu perro tiene un fibrosarcoma se basa en un análisis clínico, donde el veterinario examinará si hay presencias de masas o bultos en su cuerpo, palpándolo para evaluar el tamaño, la consistencia y si está adherido a tejidos subyacentes. A su vez, evaluará los ganglios linfáticos para detectar posibles signos de propagación local.

Si se sospecha de la existencia de un tumor, el profesional planificará un estudio de imagen como la radiografía o ecografía para evaluar si el tumor está afectando al hueso o para detectar metástasis, así como para analizar masas en tejidos blandos y guiar la biopsia en el caso de que sea necesaria.

El diagnóstico definitivo del fibrosarcoma se basa en una biopsia, donde se extraen las células de dicho tumor con el fin de analizarlas posteriormente.

Si te preguntas cómo curar un fibrosarcoma en perros debes saber que el tratamiento principal es la cirugía, con el fin de eliminar por completo este tumor lo antes posible. En algunos casos se puede recurrir a la radioterapia o la quimioterapia como tratamiento complementario, especialmente en las situaciones donde el tumor no puede ser eliminado por completo. Estas son las opciones más comunes para el tratamiento en estos casos:

• Cirugía: es el tratamiento de elección y consiste en remover el tumor junto con tejidos sanos de alrededor con el fin de impedir que reaparezca. Como estos tumores suelen ser bastante invasivos, se puede optar por la realización de una cirugía más extensa para asegurar que se haya eliminado todo el tejido afectado.
• Radioterapia: si la extracción completa del tumor no es posible o si se muestran márgenes quirúrgicos comprometidos, la radioterapia puede ser utilizada para tratar el área quirúrgica y destruir las células tumorales residuales afectadas. Por otra parte, en algunos casos la radioterapia puede administrarse antes de la cirugía para intentar reducir el tamaño del tumor y hacer más fácil su extirpación.
• Amputación: este tratamiento suele ser útil en los casos donde el tumor se localiza en las extremidades y no se puede extirpar completamente.
• Quimioterapia: no siempre es efectiva contra los fibrosarcomas, pero si el tumor es inoperable o si hay evidencia de metástasis puede ser considerada. También puede ser utilizada junto con la cirugía y la radioterapia.

Otras alternativas

En ocasiones, el tumor no se puede extraer o el pronóstico es reservado, así que, debido al dolor que produce, se pueden administrar analgésicos, antiinflamatorios y otros fármacos para mantener la calidad de vida del perro.

El éxito del tratamiento y el pronóstico dependerán de factores como la localización de dicho tumor, el tamaño, la posibilidad de extirpación completa y si ha habido metástasis. Aunque la extirpación quirúrgica con márgenes amplios es el tratamiento ideal, la tendencia del fibrosarcoma a recurrir localmente significa que el pronóstico puede ser reservado. La combinación de tratamientos puede mejorar la calidad de vida del perro. Veamos de qué depende el pronóstico:

• Si el tumor se encuentra en áreas donde la realización de la cirugía completa es difícil, como cerca de las articulaciones, en el hocico o en el caso del fibrosarcoma oral, el pronóstico puede ser peor debido a la dificultad para extraerlo.
• Tumores más pequeños y localizados en una sola zona tienen mejor pronóstico, especialmente si pueden ser removidos por completo. Sin embargo, los tumores más grandes o que se han diseminado a otras partes del cuerpo tienen un mal pronóstico.
• Si el tumor puede ser extirpado sin dejar células tumorales residuales, el pronóstico es generalmente bueno, pero si el tumor no puede ser removido por completo, la tendencia a volver a aparecer empeora el pronóstico.
• El fibrosarcoma de bajo grado en perros es menos agresivo, por lo que también podría tener un pronóstico mejor al diseminarse y crecer menos que el de alto grado.
• La efectividad de tratamientos como radioterapia o quimioterapia también puede ayudar para mejorar el pronóstico, especialmente si la cirugía no es curativa.

Ahora que tienes toda la información del fibrosarcoma en perros, recuerda que la detección temprana puede ser la clave para obtener el mejor pronóstico posible.

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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