Enfermedades en los ojos de los gatos

Las enfermedades oculares en gatos se caracterizan por presentar secreción, lagrimeo excesivo, enrojecimiento o inflamación, entre otros síntomas. Estos signos pueden estar asociados a distintos problemas de salud, algunos de carácter vírico, otros bacteriano y, otros, como consecuencia de cuerpos extraños o traumatismos. Los siguientes son los más comunes:

• Úlceras corneales
• Úlceras dendríticas
• Conjuntivitis
• Uveítis
• Glaucoma
• Obstrucción en el conducto nasolacrimal

En los siguientes apartados hablaremos de los síntomas de cada una de estas enfermedades en los ojos de los gatos y de sus posibles tratamientos.

Esta enfermedad en los ojos de los gatos es bastante frecuente y su gravedad va a depender de la profundidad del daño producido que, junto a la causa o el tipo de úlcera, va determinar el tratamiento. Las úlceras producen dolor, más o menos intenso en función de la profundidad, siendo las superficiales las más dolorosas, ya que en esa zona se encuentran terminaciones nerviosas en mayor número. Además, el aspecto de la córnea se modifica.

Las causas más habituales de las úlceras son los traumatismos, como arañazos, cuerpos extraños, pelos que crecen y rozan el ojo, infecciones bacterianas, etc. Destacan las producidas por el herpesvirus, causa de unas úlceras dendríticas que explicaremos en el siguiente apartado.

Nuestro veterinario puede llegar al diagnóstico aplicando en el ojo afectado fluoresceína o, en el caso de úlceras más superficiales, un pigmento denominado Rosa de Bengala. El tratamiento va a depender de la causa, pero debe implantarse con rapidez para evitar la perforación de la córnea. Las más graves requieren cirugía.

Destacamos este tipo de úlcera como una de las enfermedades en los ojos de los gatos callejeros más comunes, ya que se produce por el herpesvirus, causa de rinotraqueítis felina, muy contagioso entre gatos que conviven en colectividades. Dentro de las infecciones en los ojos de los gatos, la rinotraqueítis, responsable de una intensa secreción ocular, es la más común, especialmente entre los gatos más jóvenes.

Aunque estas úlceras son leves, el virus puede originar úlceras más profundas que, sin tratamiento, podrían llegar a perforar la córnea, lo que es causa de extirpación de uno e, incluso, los dos ojos en los casos más graves. Las úlceras aparecen en gatos enfermos de rinotraqueítis pero, también, en aquellos que, superada una primera infección por este virus, lo mantienen en su organismo latente y este se reactiva por estrés, por la administración de corticosteroides, etc., debido a su efecto inmunosupresor. Estas úlceras suelen acompañarse de conjuntivitis y aparecen en uno o en los dos ojos.

Destacamos la conjuntivitis como enfermedad ocular muy frecuente, sobre todo en gatitos. Aunque puede originarse por causas como un cuerpo extraño, suele asociarse al herpesvirus que comentábamos en el apartado anterior, incluso en los casos en los que el gato no manifiesta otros síntomas.

La conjuntivitis se caracteriza por su presentación bilateral, con enrojecimiento ocular, una secreción purulenta abundante que llega a pegar los párpados cuando se seca y, en los casos de rinotraqueítis, se acompaña de un cuadro respiratorio. Requiere asistencia veterinaria, con tratamiento de soporte y antibióticos. Para más información, no te pierdas el siguiente artículo: "Conjuntivitis en gatos - Causas, síntomas y tratamiento".

Esta es otra de las enfermedades oculares en gatos que aparecen con mayor frecuencia. Lo más importante es saber que se trata de un síntoma común en varias patologías, aunque, otras veces, se relaciona con traumatismos por peleas o atropellos. Estas causas son la toxoplasmosis, la leucemia felina, la inmunodeficiencia, el PIF, algunas micosis, la bartonelosis, el herpesvirus, etc. Algunas de estas enfermedades resultan potencialmente mortales, de ahí la importancia de acudir al veterinario, ya que el tratamiento pasa por identificar esta causa.

La uveítis puede ser más o menos grave en función de las estructuras que se encuentren involucradas, distinguiéndose entre uveítis anterior, intermedia y posterior. Los síntomas de uveítis son dolor, fotofobia, lagrimeo intenso y protrusión del tercer párpado. El ojo parece más pequeño. Así, el tratamiento se orienta hacia la causa de la uveítis y el control de los síntomas.

De entre las enfermedades más comunes en los ojos de los gatos destacamos, también, el glaucoma. Esta patología se debe a diferentes causas que tienen en común que aumentan la presión intraocular al producirse más humor acuoso del que se elimina. Este proceso daña el nervio óptico y es causa de ceguera. Entre las causas destaca el síndrome de dirección inadecuada del humor acuoso.

Por suerte, el glaucoma no es muy habitual en gatos y, cuando se presenta, lo hace en aquellos de más de 8-9 años de edad. Además, suele estar asociado a uveítis, neoplasias, traumatismos, etc. De ahí la importancia de acudir rápido al veterinario en cuanto apreciemos signos de enfermedad ocular que, en el caso del glaucoma, van a ser los de la patología que lo provoca.

Cuando el glaucoma provoca dolor, agrandamiento del globo ocular o dilatación de la pupila es probable que el ojo esté ya ciego. El diagnóstico se basa en la medición de la presión intraocular. El tratamiento pasa por identificar la causa y emplear medicación para disminuir el dolor y la presión en el interior del ojo.

Un constante lagrimeo en uno o los dos ojos nos puede alertar de la presencia de una enfermedad ocular en nuestro felino. Este lagrimeo puede deberse a algún cuerpo extraño pero, si es continuo, lo que se conoce con el nombre de epífora, podría indicarnos una obstrucción en el conducto nasolacrimal. Por este conducto el exceso de lágrimas se desvía hacia la nariz, sin embargo, al obstruirse las lágrimas salen por los ojos. Este proceso puede ser temporal, por alguna infección o inflamación, o permanente, normalmente de nacimiento. Es más habitual en razas braquicefálicas como los persas. Debemos consultar con nuestro veterinario, ya que el tratamiento va a depender de la causa.

Los gatitos nacen con los ojos cerrados y comienzan a abrirlos hacia los ocho días de vida. Aun con los ojos cerrados pueden padecer en ellos infecciones. En estos casos veremos uno o los dos ojos hinchados. Si presionamos con suavidad puede salir pus que, al secar, formará costras que debemos limpiar con una gasa o algodón humedecido en suero fisiológico o agua tibia. Es muy importante acudir al veterinario para que la infección, habitualmente provocada por herpesvirus, no dañe el ojo. Se va a necesitar tratamiento antibiótico que habrá que aplicar separando suavemente los párpados, mientras el ojo no se abra completamente. Así mismo, debemos extremar la higiene, ya que es una afección muy contagiosa. No te pierdas el siguiente artículo para saber cómo limpiar adecuadamente el ojo dañado: "¿Cómo limpiar un ojo infectado de un gato?".

Este artículo es meramente informativo, en ExpertoAnimal.com no tenemos facultad para recetar tratamientos veterinarios ni realizar ningún tipo de diagnóstico. Te invitamos a que lleves a tu mascota al veterinario en el caso de que presente cualquier tipo de condición o malestar.

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