Baiji o delfín chino de río

La clasificación taxonómica del baiji ha sufrido alteraciones a lo largo de los años. Anteriormente, se ubicaba en la familia Platanistidae, pero también se le consideraba en algunos casos como una superfamilia llamada Iniidae. No obstante, hace unos 20 años su clasificación cambió y fue incluido en la familia Lipotidae, en la que existe una sola especie actualmente: Lipotes vexillifer, que es la que aquí nos ocupa.

En cuanto a las características del baiji, estamos ante un delfín de cuerpo aerodinámico y fusiforme. El hocico es alargado y puede tener una ligera curvatura hacia arriba en la punta, siendo este uno de los rasgos más destacables de la especie. En comparación con las especies de delfines marinas, los ojos del delfín chino de río son muy pequeños, por lo que se observan como dos pequeños puntos, situados uno a cada lado de la cabeza. El orificio nasal o espiráculo tiene forma elíptica. En este punto, es importante recordar que los delfines necesitan salir a la superficie para respirar, como explicamos en este post: "¿Por dónde y cómo respiran los delfines?".

El delfín chino de río es de color gris azulado en el dorso, mientras que en el vientre presenta una coloración más clara o incluso blanca. La aleta dorsal tiene forma triangular y es mucho más pequeña la de otras especies. En lo referente al tamaño del baiji, las hembras son más grandes que los machos, midiendo entre 1,85 y 2,55 metros de largo y pesando de 64 a 167 kg. Los machos, por su parte, miden de 1,40 a 2,15 m y pesan de 42 a 125 kg.

Generalmente, nada a 30-40 km/h, pero puede alcanzar velocidades de hasta 60 km/h. Depende fundamentalmente del sistema de ecolocalización para socializar, alimentarse y evitar depredadores, que son principalmente los humanos. Las frecuencias de los clics o sonidos que emite están entre los 70 y los 100 kHz.

El baiji es una especie endémica del río Yangtze, en China, aunque en algún momento también estuvo presente en el río Qiantang y los lagos Dongting y Poyang, pero desaparecieron de estos ecosistemas. El hábitat lo conforman principalmente lugares de remolinos que se forman por la convergencia de los canales de agua, pero la especie ha disminuido considerablemente incluso dentro de su área de distribución en el río Yangtze.

El delfín chino es una especie de hábitos crípticos, es decir, se camufla muy bien en su hábitat, por lo que las observaciones de sus hábitos y comportamientos han sido algo complicadas para estudiarlos.

Como hemos mencionado, los hábitos del baiji dificultan conocer sus costumbres, no obstante, se ha reportado que se unen en parejas y estas, a su vez, en grupos sociales más numerosos, de unos 10 individuos. Vivir en grupos es un aspecto común de las diferentes especies de delfines, aunque en los marinos estas agrupaciones suelen ser más numerosas.

El delfín chino acostumbra a ubicarse generalmente cerca de áreas con remolinos, en los cuales busca el alimento. Suele descansar durante la noche en lugares donde las corrientes son lentas. Así pues, el baiji tiene hábitos principalmente diurnos. Algo curiosos es que la visión de esta especie es bastante reducida debido a que las aguas del hábitat son muy turbias, de manera que depende fundamentalmente de la ecolocalización.

El baiji es un animal carnívoro y su dieta está constituida totalmente por el consumo de peces. Se apoya en su largo hocico para buscar en los fondos fangosos a sus presas, aunque también usa su ecolocalización para ubicar a los peces. El alimento es buscado en zonas de poca profundidad o cerca de los bancos de arena.

La madurez sexual de las hembras llega a los 6 años, mientras que los machos la alcanzan a los 4 años. La temporada reproductiva ocurre en el primer semestre del año, más o menos entre febrero y abril. Las hembras tienen una ovulación periódica y en los machos la densidad de esperma varía según la época.

La gestación dura unos 11 meses y en cada parto tienen una sola cría, que suele medir 0,8 m aproximadamente. Como animales mamíferos que son, los delfines chinos son amamantados por sus madres durante unos 8 y hasta 20 meses, manteniéndose siempre cerca de ellas mientras nadan, salen a respirar o se alimentan. El intervalo de embarazos en la especie es de cada 2 años.

La clasificación del baiji o delfín chino de río, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), es de peligro crítico de extinción, posiblemente extinto, debido al gran declive de la especie y que su ultimo avistamiento confirmado fue en el 2022. Además, un estudio exhaustivo con barcos de investigación, realizado en el 2006, no pudo encontrar un solo baiji en su rango de distribución, al igual que sucedió durante la realización de otro estudio en el 2012. Según algunos reportes anecdóticos posteriores, pero sin evidencia fotográfica, se han visto algunos individuos.

¿Por qué se puede haber extinguido el delfín baiji?

No se ha comprobado que el delfín baiji esté extinto, sin embargo, los últimos estudios señalan que puede haber desaparecido o quedar muy pocos ejemplares. Las principales causas reportadas para el declive del delfín chino fueron los recurrentes accidentes con embarcaciones, el enredo con mallas de pesca y el impacto al hábitat para la construcción de canales. También, durante años este delfín fue cazado para diferentes usos. Así mismo, la sedimentación por malas prácticas y la contaminación del agua han influido en su grave desaparición.

Si a ti también te preocupa la preservación de las especies, en este otro artículo compartimos Cómo ayudar a los animales en peligro de extinción.