Cenla

Pésima atención a perros geriátricos, le pedí un chenil, interior calefactado 24h al día, que fuese soleado, y les llevé colchones de 30 cm de altura para ada perro.Cuando los dejé e chenul estaba húmedo y frío y ante mi descontento, recogieron el agua del suelo y pusieron una lampara de calor, que eso para un mes de enero no sirve de nada, el chaval que me los recogió, me prometió que se lo cambiaría por un calefactor.
Cuando llegue a recogerlos, que me adelanté un día por cierto me los encontré con un frío y una humedad que hacía el 11 de enero en valencia que no se lo deseo ni a los presos de Guantánamo.
El chenil estaba empapado, los perros sucios de heces, las colchonetas encima de un muro, sin calefacción, estaban los dos tiritando.
En el coche, el macho ya vino enrollado, al llegar a casa, comenzó un episodio de rectorragia, fiebre, temblores, problemas para miccionar e inapetencia. Lo llevé al veterinario nada más puede, a los dos días, ya que además presentaba un cuadro de tos. A raíz de este episodio, mi perro ha desarrollado una precipitación de síntomas que pese a su edad estaban controlados. Reconoció la negligencia de que los perros no tuvieran las colchonetas, pero nunca pidio disculpas por no tener el habitáculo de un perro geriátrico bajo las exigencias que le pedí y que nunca me negué a pagarlo si era necesario.
La muy tacaña e inconsciente solo se respaldó diciendo que ellos solo ponen la calefacción de noche. Y yo me pregunto, el día 11 de enero a las 18:30h no era ya de noche, y el calefactor no estaba puesto . Solo haceros saber que tras este episodio el perro está haciendo rehabilitación ,y el esfuerzo diario trabajando con el, verlo que no se puede levantar apenas, eso no se lo perdono.
Ahora que cada cliente haga lo que considere, pero esa señora no vuelve a ver a u o de mis perros.