Abeja melipona

Esta abeja es más pequeña que las especies con aguijón, como la abeja europea. Mide alrededor de 10 mm y el ancho de sus alas está entre 7 y 8 mm. Su cuerpo es robusto y es la más grande entre las especies de abejas sin aguijón. Presenta franjas negras combinadas con un color de fondo ocre o anaranjado, y tiene pelos blancos a los lados del abdomen y en la cabeza. Aunque las hembras carecen de un aguijón funcional y no pueden picar, pueden defenderse mordiendo, lo cual no dudan en hacer ante la presencia de un intruso.

A diferencia de otras especies de abejas, donde las castas constituidas por reinas, obreras y machos o zánganos son de diferentes tamaños, siendo la reina la de mayores proporciones, en la abeja melipona no se observa de forma marcada esta característica. Es decir, las castas tienen un tamaño más o menos similar.

La abeja melipona se distribuye por países como México, Belice, Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica y Panamá. Se desarrolla en hábitats tropicales y subtropicales, como selvas, bosques secos, sabanas y áreas abiertas, manglares, áreas cultivadas y urbanas con la presencia de huertos o jardines.

Como todas las abejas, necesita una diversidad y abundancia de flores para poder prosperar, y prefiere espacios con abundante vegetación. Los nidos son construidos en cavidades naturales de rocas o árboles, pero también pueden hacerlo en huecos en el suelo o en estructuras artificiales. Lo importante es que el lugar les brinde protección contra depredadores y las condiciones ambientales. Aquí te mostramos los "Depredadores de las abejas y avispas".

Estas abejas responden a las costumbres comunes de este tipo de insectos, por lo que son eusociales. En este sentido, tienen una organización social compleja que se desarrolla en una colonia, la cual puede variar en número desde unas pocas docenas hasta cientos de individuos. La presencia de castas indica una división del trabajo, la reina, las obreras y los zánganos tienen funciones bien definidas:

• La reina es responsable del aspecto reproductivo, junto con los machos, cuya única función es aparearse con la reina.
• Las obreras deben construir y reparar el nido cuando sea necesario, recolectar, procesar y almacenar el alimento, cuidar de las nuevas generaciones y defender el panal.

En las abejas meliponas, como en otras especies, se observa un sofisticado sistema de comunicación, que incluye la transmisión de información química a través de la producción de feromonas y movimientos corporales. Estos permiten coordinar las actividades dentro del nido y también la ubicación de alimento. Son insectos altamente cooperativos en todas las funciones, aspecto indispensable para el desarrollo adecuado de la colonia.

La abeja melipona se alimenta del polen y néctar de una gran variedad de flores que prosperan en los hábitats donde se desarrolla. El polen es una fuente importante de proteínas y otros nutrientes como minerales y vitaminas, mientras que el néctar, compuesto de azúcares naturales, es una fuente de carbohidratos esenciales para la obtención de energía y la producción de miel, la cual se convierte en la fuente de alimentos cuando las flores escasean.

Estas abejas también suelen recolectar resinas vegetales, las cuales utilizan para la construcción y reparación de los nidos, y que también ayudan a proteger contra patógenos.

Descubre más detalles en este otro artículo: "¿Qué comen las abejas?".

La reina es la única hembra fértil dentro de la colonia, por lo que la reproducción está centrada en ella. Como ocurre con otras especies, la reina virgen sale en un vuelo nupcial para aparearse con varios machos. Después de este vuelo, no se vuelve a cruzar, ya que es capaz de almacenar el esperma y utilizarlo durante toda su vida para fecundar los huevos que se convertirán en las próximas hembras, que serán reinas u obreras. Los huevos no fecundados se convertirán en zánganos.

Para que se originen nuevas reinas, las obreras encargadas del cuidado de las larvas las alimentan con jalea real y las cuidan en celdas reales especiales. Una vez que emergen como adultas, pueden asumir el rol de reina en el nido o salir con un grupo de obreras formando un enjambre para instalar un nuevo nido en otro lugar.

Consulta este otro artículo para conocer "El ciclo de vida de las abejas".

La abeja melipona no ha sido evaluada por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). No obstante, todas las abejas a nivel global han sufrido un importante descenso debido a diversos factores, como los siguientes:

• Deforestación.
• Uso de pesticidas.
• Cambio climático.
• Introducción de otras especies de abejas o avispas que generan competencia o incluso depredación.
• Afección por patógenos.

La conservación de la abeja melipona es indispensable para la reproducción de muchas especies de plantas, tanto silvestres como de interés agrícola. Por lo tanto, es una especie crucial para la dinámica ecológica y se necesitan prácticas sostenibles que garanticen su mantenimiento adecuado.